Así se empieza, agarrás la pieza que querés teñir y atás, cubrís, tapás, etc. lo que querés que quede del color original. Yo me inspiré en el color índigo, que es un azul profundo resultado de un pigmento natural. Como no tenía a mano ese material, usé anilina, y el color se asemeja bastante.
con las piezas teñidas tuve como resultado:
una carpeta
un almohadón
varios objetos para decorar
otro almohadón
divino no?